A la hora de elegir unas gafas hay que tener en cuenta dos factores importantes: una visión óptima y relajada y un look espectacular.
Un nuevo par de gafas elegido con esmero no solo le aportará atractivo, sino que reforzará y llegará a formar parte de su personalidad. Es obvio que las lentes graduadas deben proporcionar a la persona una visión óptima. Su óptico optometrista puede ayudarle no solo en la elección de la montura que más le favorezca, sino que también puede individualizar sus lentes graduadas en función de sus necesidades.
A veces no queda otra alternativa que adquirir un nuevo par de gafas. Y no solo porque haya cambiado su capacidad de visión, sino por el ritmo imparable de la moda o porque necesita un segundo par para actividades determinadas. También puede ser que las suyas se hayan quedado anticuadas. Sin embargo, como resultado de la amplia oferta disponible hoy en día, comprar una montura y unas lentes nuevas ha dejado de ser una tarea sencilla. En la actualidad, los buenos ópticos optometristas ofrecen a sus clientes una interminable variedad de modelos y características diferentes. Pero cualquiera que sepa lo que busca encontrará sin problemas el par de gafas perfecto.
Ámbito de utilización de unas gafas nuevas
Un criterio muy importante a la hora de comprar unas gafas nuevas es la posibilidad de combinarlas. Este criterio puede variar enormemente de un usuario a otro. Una de las primeras preguntas que debe hacerse es: ¿para qué necesito las gafas o para qué las necesito principalmente? Una persona que trabaje todo el día con el ordenador necesitará unas gafas distintas a las de aquella que trabaje sobre todo al aire libre o realice actividades deportivas. Cuanta más información tenga el óptico optometrista (un buen profesional siempre le hará muchas preguntas), más sencillo resultará el proceso de selección. Compare su experiencia comprando unas gafas nuevas con la de adquirir un coche. El óptico optometrista le informará y mostrará todas las «características» que le puedan sentar mejor.
Tecnología punta
Otra máxima a la hora de comprar unas gafas: cuanto más individualizadas sean las gafas, mejores resultados se obtendrán en términos de calidad de visión, características de comodidad y tolerancia, por ejemplo en el caso de las multifocales. El concepto es similar al del traje confeccionado a medida, contrario al de adquirir una prenda estándar, que puede quedar bien, pero no ofrece garantía. La innovadora tecnología moderna de i.Scription® de ZEISS, para lentes ZEISS Progresiva Individual 2 or the ZEISS vision analysis all contribute towards the customised creation of your new spectacles.
Elegir unas lentes graduadas
Una vez encontrado un buen óptico optometrista, lo normal es echar un vistazo por la tienda en busca de unas monturas bonitas. Pero no todas las lentes graduadas son aptas para todos los tipos de monturas, por lo que es recomendable elegir las lentes en primer lugar. Si lo que desea es relajar y mejorar la visión, es obvio que las lentes graduadas representan el componente más importante de sus nuevas gafas. Solo unas lentes graduadas adecuadas pueden garantizar la mejora de su visión.
Antes se utilizaba principalmente vidrio mineral para la fabricación de lentes graduadas. Hoy en día, las lentgánices oras están ganando terreno. Este desarrollo conlleva algunas ventajas clave: la resistencia optimizada de estas lentes garantiza la reducción del riesgo de lesiones. Las lentes orgánicas especiales de alta calidad y con un buen tratamiento evitan las dolorosas marcas de presión y protegen contra los arañazos. Pero existen otros aspectos que juegan un papel importante en la elección de las lentes graduadas: además del factor común de las dioptrías, otros aspectos importantes son el índice de refracción del material (determinante del grosor de la lente), las llamadas geometrías asféricas (que reducen la distorsión en los bordes de la lente), las cualidades antirreflejantes y la resistencia a los golpes. Los tratamientos o acabados adicionales de las lentes pueden ohacer más sencilla la vida con las gafas. ¿Le apetece probar el tratamiento hidrofóbo o antiestático?
Nuestro consejo: las lentes graduadas deberían disponer al menos de un eficaz tratamiento antirreflejante. Los reflejos originados por las lentes a la luz del sol, conduciendo por la noche o trabajando con el ordenador, provocan distracciones. Las lentes graduadas antirreflejantes hacen que la persona casi pierda la noción de que lleva gafas.
Quizás se esté planteando comprar lentes tintadas o lentes fotosensibles. Pero cuidado: existen grandes diferencias de calidad en lo que respecta a las lentes fotosensibles. El factor decisivo a tener en cuenta es la capacidad de reacción de las lentes fototrópicas ante la variación de las condiciones de luz, tornándose claras en espacios cerrados y oscureciéndose al sol o ante una luz intensa, adquiriendo un tono similar al de las gafas de sol. Un aspecto vital es que las lentes ofrezcan protección absoluta contra la radiación UVA y UVB.
Las monturas
En lo que respecta a las monturas, el óptico optometrista suele seleccionar previamente algunos modelos que le parezcan adecuados, ya que él conoce su oferta de productos y también será quien le ayude a alcanzar su objetivo ante el amplio abanico de posibilidades. Procure dejar claras desde el principio sus preferencias en cuanto a color, material y precio. Lo más importante es que las nuevas gafas armonicen con la forma de su cara y sean compatibles con las lentes graduadas elegidas.
Por regla general se aplica lo siguiente: Las personas de cara redonda deben optar por monturas angulares, mientras que a las personas de cara angular les sienta mejor una montura redonda. Las personas de cara ovalada tienen la suerte de poder elegir la forma que quieran. Los ópticos optometristas suelen aconsejar a las personas de cara triangular o en forma de corazón que opten por una montura fina y ovalada.
Nuestro consejo: si va a comprar una montura para gafas, pídale a alguien que le conozca bien que le acompañe. Una segunda o tercera opinión le será de ayuda. Existen tres posibilidades para aquellos que no pueden prescindir de las gafas: las gafas de media montura o gafas estilosas, las lentes de contacto de un solo uso o probar la opción digital: hacerse una foto con la que podría ser su nueva montura, lo que le permite verse en la pantalla del ordenador y le ayuda a tomar una decisión.
Otro aspecto que debe considerar al comprar una montura es el material. Es obvio que el peso de las gafas juega un papel importante en la decisión. Una nueva montura debe resultar cómoda desde el momento de probárselas. Si padece algún tipo de alergia, es importante que pregunte acerca de la composición de las monturas.
Ayuda adicional para la elección de unas gafas
En la mayoría de los casos se necesitan unos tres días antes de ir a comprar las gafas definitivas. Una vez tomada la decisión, el óptico optometrista se asegura de que las gafas se asientan bien en su cara, para lo cual precisa su opinión.
Nuestro consejo: compruebe usted mismo que las gafas se asientan cómodamente. No deberían ser incómodas para la nariz, las sienes o las zonas alrededor de las orejas.
El principio «ojos que no ven, corazón que no siente» no se aplica en absoluto al caso del óptico optometrista. Puede ser muy útil en muchos casos que los clientes vuelvan una o dos semanas después de comprar las gafas nuevas para efectuar algún ajuste necesario. Un buen óptico optometrista le atenderá encantado siempre que necesite ayuda o consejo.