Como ya hemos mencionado, todos los dispositivos digitales emiten algún tipo de luz azul. Cuando exponemos los ojos a ciertas intensidades o espectros de luz azul, el cuerpo reduce los niveles de melatonina (la hormona del sueño). De este modo estamos más alerta y nos mantenemos despiertos durante más tiempo.

Por supuesto, el sueño es esencial para aliviar la fatiga ocular, por lo que debe evitarse la exposición a la luz azul antes de ir a dormir y conviene llevar gafas graduadas con Protector de luz azul especial si le gusta leer en el móvil o tableta para relajarse por la noche.

¡Los ojos adoran las verduras! Consuma verduras de hoja verde en abundancia, como el brócoli, las espinacas o el repollo, y por supuesto, zanahorias.

La hidratación también es muy importante, especialmente si padece ojos secos. Debe mantenerse hidratado para garantizar que sus ojos disponen de la humedad necesaria. Finalice su día de opciones saludables con un buen descanso nocturno, ayudará a sus ojos a recuperarse del esfuerzo diario.

Tanto para combatir el frío en invierno como para aliviar el calor del verano, los sistemas de aire acondicionado pueden resecar el aire del hogar o el lugar de trabajo. Salga al exterior de vez en cuando, o desconecte el termostato y abra una ventana.

En invierno, puede colocar recipientes con agua en una estancia caldeada para aumentar el nivel de humedad. Algunas personas hacen uso de humidificadores y los conectan en cuanto el aire se reseca demasiado. Recuerde beber agua en abundancia durante todo el día para mantener una buena salud ocular.

Pruebe aquello que mejor funcione para usted y siga haciéndolo para mantener una buena salud ocular.

Resulta muy fácil abrir el portátil y contestar rápidamente a un correo sentado en el sofá frente al televisor. Pero con frecuencia, un email se convierte en diez y cuando nos damos cuenta hemos pasado horas trabajando en una posición incómoda que puede causar dolores posturales e incrementa la fatiga ocular.

Para una mayor protección ocular durante el uso del ordenador, sea consciente de dónde y cómo trabaja. En casa o en la oficina, debería tener un espacio dedicado y adecuado a sus necesidades. Si es posible, conecte su ordenador a una pantalla de mayor tamaño a nivel de los ojos. La regla general es alejar la pantalla todo lo que pueda mientras siga viendo con nitidez. No debería flexionar el cuello hacia abajo.

Utilice siempre una silla cómoda y ajuste su altura y el ángulo del respaldo y apoyabrazos de modo que los pies se apoyen bien en el suelo y los brazos descansen ligeramente en el escritorio mientras escribe. Si es necesario, utilice un cojín para elevar su posición o sujetar la zona lumbar.

Además, debe ajustar el brillo del monitor, el tamaño de la letra y el color para mayor comodidad visual. La mayoría de los portátiles y ordenadores disponen de un filtro de luz azul que se puede temporizar y que ofrecen mayor protección por la noche. Es posible que su móvil o tableta también tengan esta función o que pueda descargar una aplicación para gestionar mejor su exposición a la luz azul. De todos modos, esto solo reduce la exposición a este tipo de luz y debe tratar de reducir el tiempo de pantalla o consultar con su profesional de la visión sobre el uso de gafas con filtro de luz azul.